martes, 11 de octubre de 2011

Alegórico.




Y eh aquí el lugar de un prologo que inventa su destino al burdo contar de la acción en palabras.

Momento donde el silencio es entero, la franqueza de la tinta inseparable del incendio al escribir. La imprudente aurora como el consabido infierno. Con incuantificable paciencia y humildad, dispuesto a centrar de nuevo mi humanidad en la fría inscripción de la voz silenciosa. Tanto al pasar de segundos postrado en la ventana en movimiento, sonriente y sosegado, apaciguado en la memoria que nunca avisa y llega infusa. La tendencia abstracta de la mente intelectual y el perfil simple de la vista llana. Una hoja postrada al frente del espejo que burdamente me refleja, entre tantas ocasiones en el que esta simple imagen esta llena de vigor. De sencilla existencia. Afortunado despertar. Pluma en tinta obscura, papel que rasgo,inspiración que dicto.

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